Estrategia que nos une
Asumámoslo, la situación que estamos viviendo ante el Covid-19 (coronavirus) no sólo representa retos en el área de salud. Un estudio de COPARMEX muestra que la pandemia traerá también una fuerte crisis económica en todo el país, derivado de aspectos como el desacelere de la industria manufacturera de Estados Unidos y el resguardo de miles de mexicanos como medida de distanciamiento social para evitar la propagación del virus.
Según datos del Banco Mundial, la Bolsa Mexicana de Valores podría caer hasta 4%. Pero, para algunos de nosotros, lo más preocupante es el efecto negativo que esto generará en los sectores comerciales locales. Pequeños y medianos negocios de nuestro estado están amenazados este efecto, ya que para mantenerse dependen de la visita y/o permanencia de clientes.
A pesar de que algunos de nosotros hemos sostenido reuniones con el sector empresarial y entes gubernamentales para plantear propuestas que apoyan a los chihuahuenses, como la suspensión del cobro de la CFE en los próximos meses, este es un trabajo en conjunto y como ciudadanos nos toca apoyarnos unos a otros. Hoy la mejor manera de ayudar es consumir productos locales. Como bien lo dijo Miguel Ángel Corona, académico de la IBERO, para mantener la economía local debemos comprar de “lo que es nuestro”.
Los beneficios que esta simple acción genera en la economía de nuestras ciudades, regiones y colonias van desde la conservación de empleos, hasta el permitirles, a estos negocios, permanecer abiertos; lo que además propicia la colaboración entre comerciantes de la misma región.
Con el consumo local no sólo les estamos ayudando a estos comercios y sus familias, nos estamos ayudando a nosotros mismos al sostener el flujo económico de la ciudad donde vivimos, asumiendo que gran porcentaje del empleo emana justamente del comercio local.
A medida que se conoce más sobre los beneficios del consumo local, han surgido campañas mediáticas como el hashtag #YoConsumoLocal, que incentivan a los mexicanos a seguir comprando de restaurantes mediante servicio a domicilio, adquiriendo la despensa en tiendas y mercados cercanos e incluso a que busquen contactar a taxistas que, a falta de clientes, se están ofreciendo a realizar distintos mandados.
La estrategia más efectiva en este momento se llama solidaridad y es algo que, como ciudadanos, no nos cuesta llevar a cabo.